El huracán Otis, que tocó tierra el sábado como categoría 5 en el estado de Guerrero, México, dejó al menos 48 muertos y 36 desaparecidos, según un reporte actualizado del gobierno federal.

Las víctimas mortales se concentran en el municipio de Acapulco, donde el ciclón provocó inundaciones, deslaves y daños generalizados en viviendas, edificios y carreteras.

Los reportes indican que las personas fallecidas incluyen a mujeres, hombres, niños y ancianos. Algunas de las víctimas fueron arrastradas por las corrientes de agua, mientras que otras murieron por la caída de árboles o edificios.

Además de los muertos, el huracán Otis dejó a 36 personas desaparecidas. Las autoridades están realizando labores de búsqueda y rescate en las zonas afectadas.

El huracán Otis también causó daños en los municipios de Coyuca de Benítez, La Unión de Isidoro Montes de Oca y Tecpan de Galeana. En estos municipios, se reportaron inundaciones, cortes de energía eléctrica y daños en infraestructura.

El gobierno federal ha desplegado a las Fuerzas Armadas y a la Secretaría de Marina para apoyar las labores de rescate y reconstrucción.

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, expresó su solidaridad con las familias de las víctimas y anunció que el gobierno federal brindará apoyo a los afectados.

Impacto del huracán Otis en Acapulco

El huracán Otis provocó graves daños en Acapulco, uno de los principales destinos turísticos de México.

Las inundaciones afectaron a miles de viviendas y negocios en el centro de la ciudad. Los deslaves bloquearon carreteras y vías de comunicación.

Las autoridades reportaron que el huracán Otis causó daños por un valor estimado de 10 mil millones de pesos.

El gobierno de Acapulco ha iniciado las labores de limpieza y reconstrucción.

Lecciones aprendidas

El huracán Otis es un recordatorio de la vulnerabilidad de México a los fenómenos naturales.

Las autoridades mexicanas han anunciado que reforzarán los sistemas de alerta temprana y de respuesta a emergencias para reducir el impacto de los huracanes y otros desastres naturales.

El gobierno federal también ha anunciado que invertirá en la construcción de viviendas y edificios más resistentes a los desastres naturales.