Ser flojo, principal requisito para ser regidor de Mérida
La mayoría de los ediles de la capital yucateca nunca van a sus oficinas, se la pagan echando la flojera, pero su jugoso sueldo y sus exorbitantes vales de despensa por 14 mil pesos sí los cobran puntuales
Fuente: REDACCION

Mauricio Vila Dosal debe estar muy decepcionado del Cabildo de Mérida que presidió con mucha dignidad durante dos años y medio, pues la gran mayoría de los regidores que integran el cuerpo colegiado son unos flojos.

Tal parece que el principal requisito para ser edil de la capital yucateca es ser un flojonazo de primera pues la mayoría de los concejales (con honrosas excepciones) se caracterizan por ser bolsones.

Siempre ha sido así, este Cabildo no es el primero y seguramente no será el último que tiene integrantes muy perezosos, pues la mayoría de ellos no acude a trabajar, y si por alguna extraña razón asiste a su oficina en el Palacio Municipal solo van por una hora o dos cuando mucho y un par de días a la semana.

Es verdad que muchos de ellos tienen oficinas particulares, pero la realidad es que el único enlace entre la población y los regidores son sus oficinas ubicadas en la sede del Ayuntamiento de Mérida, precisamente donde difícilmente acuden a laborar.

En el PAN hay dos o tres concejales que siempre asisten a trabajar, lo mismo podemos decir del PRI que también tiene un par de ediles muy disciplinados, pero si el Cabildo de Mérida está conformado en total por 19 regidores podemos concluir que la mayoría son unos simples burócratas sin oficio político, inoperantes e incapaces de resolver los problemas de la gente.

De representantes ciudadanos no tienen nada, pues no representan los intereses de la gente, simplemente esperan que llegue la quincena para cobrar su jugoso sueldo, sus vales despensa y cada dos meses sus bonos de “productividad” aunque de productivos no tengan nada.

Para que la gente sepa, de acuerdo al sitio web del Ayuntamiento de Mérida, cada regidor al mes gana 63 mil pesos, además cobra 14 mil pesos en vales de depensa y tienen derecho a 40 días de aguinaldo.

Es necesario aclarar que los sueldos de la alcaldesa María Fritz, del secretario de la Comuna Arturo Sabido y de la síndico Claudia Canto son más altos que los de sus compañeros.

Así que el buen ejemplo que dio Vila cuando fue alcalde no lo siguió la mayoría de sus ex compañeros regidores. Mientras Vila se parte el lomo haciendo una fructífera precampaña en el interior del estado, la mayoría de los regidores de su partido (PAN) y de los demás institutos políticos brillan por su ineficacia e incompetencia.

Por cierto, nos informan que la sucesora de Vila, María Fritz Sierra, necesita con urgencia una brújula porque no sabe dónde está parada. Hasta el día de hoy solo se la pasa posando para la foto, cortando listones al estilo Ivonne Ortega, ambas igual de superficiales.

A Fritz Sierra todavía no le cae el veinte que gobierna la ciudad más grande e importante de Yucatán y que ello trae consigo una responsabilidad enorme.

Fritz Sierra, consuegra de Liborio Vidal Aguilar, aún está lampareada porque no puede creer que sea alcaldesa interina de Mérida a pesar que los ciudadanos ni siquiera la conocen.

Y a pesar de que sabe que “el horno no está para bollos” se da el lujo de salir a pasear a la Ciudad de México con dinero del erario con el pretexto “de la agenda de protección al medio ambiente”.

Es muy sorprendente que Fritz asista a estos eventos que tienen por objetivo cuidar la naturaleza pero la Comuna siga dando facilidades para realizar construcciones por toda la ciudad permitiendo talar árboles y generando así mucho más calor y un daño irreversible al medio ambiente.

Mérida tiene muchísimas plazas comerciales pero cada vez menos árboles, responsabilidad compartido por los tres órdenes de gobierno.