No movió un solo dedo ni gastó un peso, pero Pablo Gamboa Miner será senador de la República, gracias a la lista del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, y claro, gracias a las influencias de su papá, Emilio Gamboa Patrón.
Aunque es muy joven y apenas lleva un cargo de elección popular ganado, Pablo Gamboa aprendió muy bien de su papá el arte del brincar de un puesto a otro de manera plurinominal.
De hecho, Emilio Gamboa lleva muchísimos años viviendo de cargos en el Congreso de la Unión (ha sido varias veces diputado federal y senador) y jamás ha sido electo por el pueblo, siempre ha sido “pluri”, gracias a que el PRI le da el “visto bueno”, es el “chapulín” priista por excelencia.
A su corta edad y con tan solo un cargo ganado democráticamente, ahora Pablo Gamboa se dispone a vivir seis años del pueblo, ganando más de 200 mil pesos al mes.
Como es plurinominal y no fue electo por ningún estado, no necesita visitar Yucatán, tampoco debe hacer recorridos ni con la militancia priista ni con los ciudadanos, como nunca lo hizo su papá.
Es el mismo caso de Angélica Araujo Lara, quien ocupa una curul en el Senado por el principio de “primera minoría”; por esa razón jamás visitó Yucatán, nunca hizo un informe y en general jamás se interesó por los ciudadanos.
Lo mismo se espera que haga Pablo Gamboa Miner; lo más probable es que demuestre nulo interés por los ciudadanos como lo hizo los tres años que llevando cobrando como diputado federal del PRI.
Por cierto, los ingresos mensuales de un senador ascienden a más de 200 mil pesos; también pueden facturar absolutamente todo, por lo que ese sueldo se va íntegro a sus bolsillos.