Diputados le regalaron al gobernador 1500 millones por el Escudo Yucatán
Hoy termina la peor legislatura de la historia de Yucatán; diputados salientes fueron los que aprobaron el Escudo Yucatán, y con ello le regalaron a Rolando Zapata 1500 millones de pesos, que nadie sabe en que se invirtieron
Fuente: REDACCION

Los 25 diputados locales que hoy finalizan su terrible gestión fueron los que le aprobaron al gobernador Rolando Zapata Bello la deuda por mil 500 millones de pesos por el proyecto denominado “Escudo Yucatán”, que a la fecha nadie sabe en que se vio reflejada esa exorbitante cifra.

La presidenta saliente del Congreso del Estado Celia Rivas Rodríguez fue la que operó políticamente con todas las bancadas para que aprueben el deuda por mil 500 millones de pesos, dinero que supuestamente iba a estar destinado a la seguridad del estado.

De manera tal que el Escudo Yucatán fue gracias al voto a favor de los legisladores del PRI, PAN, PRD, Nueva Alianza y Verde Ecologista. Ninguno de los integrantes de estas bancadas cuestionó el destino de los mil 500 millones de pesos, por el contrario, estuvieron muy calladitos, sumisos y obedientes.

Paradójicamente en los últimos años se dispararon los robos, asaltos a mano armada, violaciones, homicidios, feminicidios y diferentes delitos, cuando se esperaba que fuera al contrario. De hecho muchos crímenes quedaron en la impunidad.

De este modo termina hoy la infame labor de Celia Rivas Rodríguez, oscuro personaje de la política local, que intentó por todos los medios frenar la llegada de Uber, pues estuvo mucho más preocupada en obedecer la línea que le dieron tres años en el Palacio de Gobierno que en trabajar a favor de los yucatecos.

Son muy poquitas las iniciativas que los diputados de la legislatura saliente aprobaron a favor del pueblo, quizá la más importante fue la que sanciona la porno venganza.

Fuera de ello los diputados siguieron únicamente las instrucciones que le daban en sus partidos políticos. Por ejemplo, todos recordamos el sepulcral silencio que guardaron cuando se vendió el playón de Chuburná, y el daño que le causó al medio ambiente.

Tampoco ninguna diputada se pronunció en la tribuna del Congreso del Estado por el múltiples feminicidios ocurridos en Yucatán en tan solo año y medio.

Y como esos casos muchos más donde los legisladores prefirieron quedarse callados que defender los intereses de la sociedad. Por eso y más, serán juzgados en su conjunto como la peor legislatura de la historia de Yucatán.