No cabe duda que el PRI es el mejor ejemplo en la práctica de nepotismo, y la Secretaría de Educación del Gobierno estatal es una clara muestra, pues ahí existen muchos “juniors”, aviadores y demás casos de pudrición política.

En esta nota te presentamos los casos más descarados de nepotismo, pues priistas influyentes colocaron a sus hijos en la administración de Rolando Zapata Bello, y hasta ahora continúan en sus cargos.

Por ejemplo, José Luis Suárez Hernández, hijo de José Luis Suárez Carrillo, a quien su padre benefició con una clave alta como personal federal homologado: E7235 Profesor de Enseñanza Superior Titular "C" Tiempo Completo, con sueldo mensual de $32,118.64.

Estuvo trabajando en las oficinas centrales de la Secretaría de Educación y una semana antes se le ubicó en la Unidad Administrativa y Financiera de la Dirección de Educación Media Superior.

Sissy Aimé Alejos Torres, es hija de Wilma Torres Narváez, ambas funcionarias del gobierno del estado. Sissy Alejos llegó a la Coordinación del Telebachillerato Comunitario, dependiente de la Dirección de Educación Media Superior, una semana antes que acabe la administración de Rolando Zapata.

Sissy Alejos goza de una base recién otorgada con clave E7227 Profesor de Enseñanza Superior Titular "A" Tiempo Completo, con sueldo mensual de $22,984.00.
Y cómo señalamos en nota aparte se encuentra el ofensivo caso de Gabriela Alexis Muñoz Zapata, hija de Gabriela Zapata Villalobos. La mamá fue 11 años directora de Educación Media Superior, y los últimos tres años trabajó en la misma dependencia con su hija, quien fue Jefa de Recursos Humanos de la citada dirección y hasta el día de hoy ocupa el mismo puesto.

Asimismo, la hermana de Gabriela Muñoz (Galia), y su papá, Galo Muñoz, también cobran en la Segey, una como maestra y el otro tiene un cargo administrativo.

Llama mucho la atención que la nueva directora de Educación Media Superior, Linda Basto Aguilar y su jefa administrativa Aida Aguilar Castillejos, toleren estos actos de nepotismo.

Habiendo tantos docentes muy capacitados, éticos y profesionales con contratos o buscando trabajo, es muy raro que la nueva administración estatal conserve a estos sujetos cuyo único mérito es tener papás priistas influyentes.