Mérida, Yucatán a viernes 26 de abril de 2024
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En cambio, actualmente, los secretarios del gabinete de Mauricio Vila se sentaron a pensar si deben liquidar a los juniors priistas que entraron a la administración pública gracias a las influencias de sus padrinos políticos, muchos de los cuales ni siquiera trabajan, ya que son aviadores.
Hagamos memoria: el 01 de agosto del 2007 Ivonne Ortega asumió el cargo de gobernadora de Yucatán; en muy pocos días corrió a miles de empleados de la administración de Patricio Patrón, muchos eran panistas, muchos no pertenecían a ningún partido político, pero los sacó a todos.
Todo lo que oliera a Patricio Patrón debía ser despedido del gobierno, así era la mentalidad de quien fue la peor gobernadora que ha tenido Yucatán; por ello se fueron en muy pocos días miles de personas con cargos, altos y bajos, con o sin base, panistas y apartidistas.
En agosto del 2010 Angélica Araujo asumió el cargo de alcaldesa de Mérida y ocurrió exactamente lo mismo: en una semana despidió a cientos de empleados del Ayuntamiento de Mérida.
Cortó cabezas parejo: fueran panistas o no, con el solo hecho de haber trabajado en la administración de César Bojórquez era motivo suficiente para deshacerse de ellos.
Lo peor de todo es que ni Ivonne ni Angélica liquidaron conforme a la ley a estas personas; en la mayoría de los casos las víctimas de estos atropellos demandaron ante el Tribunal de los Trabajadores del Estado.
Ahora los diputados del PRI se rasgan las vestiduras y piden al gobierno actual que no despida gente, cuando los mandatarios de su partido liquidaron a todo lo que no huela a PRI. No cabe duda que tienen muy poca memoria.