Desprestigiados priistas firman convenio por la legalidad
Tres priistas totalmente desacreditados firmaron un acuerdo para “fomentar la cultura de la legalidad”. Los tres llevan muchísimos años mamando del erario, y uno de ellos fue cuestionado cuando ganó su diputación, ya que en su distrito se perdieron los votos de nueve casillas
Fuente: REDACCION

Como si se tratara de un chiste, tres priistas se reunieron ayer para firmar un convenio “a favor de la legalidad”. Nos referimos al presidente del Congreso del Estado Felipe Cervera Hernández, a su compañero diputado Enrique Castillo Ruz y al presidente del Poder Judicial estatal, Ricardo Ávila Heredia.

No es broma, estos tres sujetos signaron un convenio para “fomentar la cultura de la legalidad”. Ahora resulta; por eso vamos a explicar la razón por la cual estas tres personas son las menos indicadas para hablar de legalidad.

Felipe Cervera fue ampliamente cuestionado en las pasadas elecciones locales, pues en su distrito (el séptimo) se perdieron los paquetes electorales de nueve casillas, lo que le permitió ganar a duras penas por 374 sufragios, que no representan ni el 1% del total de sufragios de esa demarcación.

A pesar que fue enviado al distrito siete, una demarcación 100 % priista, no pudo ganar claramente; incluso, su más cercana competidora aseguró que le robaron la elección, pues no es muy normal que se pierdan los sufragios de nueve casillas. Este incidente jamás aclarado y le permitió a Felipe llegar al Congreso del Estado.

Ya que hablamos de diputados del PRI, no olvidemos que Enrique Castillo Ruz fue el responsable de generar salarios terriblemente bajos durante los seis años que cobró como secretario del Trabajo en el gobierno de Rolando Zapata.

Tanto Felipe como Enrique son chapulines que no dejan de mamar del erario, pues llevan muchísimos años sangrando el presupuesto. Felipe ha sido dos veces diputado local, dos veces legislador federal, secretario de Desarrollo Rural; nunca ha trabajado en la iniciativa privada.

Enrique Castillo ha sido alcalde de Umán, diputado local, federal y seis años secretario de Trabajo. En Umán durante muchos años su familia tuvo el control de la localidad, hasta que perdieron.

No podemos dejar de mencionar al presidente del Tribunal Superior de Justicia, Ricardo Ávila Heredia, quien hace unas semanas se quejó amargamente de la austeridad que existe en Yucatán y en el país; expuso que el presupuesto del que dispone “no le alcanza”, pero él cobra casi 110 mil pesos mensuales.

Los tres son orgullosamente priistas y se ayudan mutuamente ya que en Yucatán son los únicos espacios que domina el PRI, y lo más seguro es que en el 2021 el tricolor pierda el control del Poder Legislativo.