Mérida, Yucatán a jueves 25 de abril de 2024
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A partir de hoy 31 de enero y hasta el 05 de febrero se realizarán en el municipio de Kanasín los torneos de lazo, en donde los toros destriparán a decenas de caballos, para diversión del público que paga por ver estos sangrientes espectáculos.
Estos eventos se llevan a cabo con el pretexto de celebrar a la Virgen de la Candelaria, donde correrá muchísima cerveza, pero lo peor de todo, la sangre de los caballos, que son utilizados como “carne de cañón”, pues los organizadores los usan como si fueran objetos y no sintieran dolor.
Este evento fue autorizado por el alcalde priista de Kanasín ´William Pérez Cabrera, pero para desviar la atención ya no se llaman torneos de lazo, sino “duelo de ganaderías” y son un negocio millonario tanto para los organizadores como para los ayuntamientos.
El negocio consiste en la venta indiscriminada de alcohol, y por supuesto en las entradas para ver los “duelos de ganaderías”. Económicamente todos ganan, los únicos que salen perdiendo son los caballos que acaban destrozados.
Pero no se puede esperar nada del alcalde priista William Pérez, pues si no le interesan las vidas de las personas, mucho menos de los animales.
Recordemos que cuando ocurrió la explosión de un predio el 31 de diciembre en Kanasín y varios niños sufrieron severas quemaduras el presidente municipal se encontraba en Miami, Florida, gastando su jugoso aguinaldo.
A pesar de haberse tratado de un asunto de extrema gravedad, el primer edil no interrumpió sus vacaciones en Estados Unidos; no olvidemos que la explosión ocurrió en una casa que acumulaba explosivos, y el Ayuntamiento de Kanasín sabía que en ese predio se vendían “bombitas” de forma clandestina pero nunca impedió su funcionamiento.
Esa negligencia dio como resultado una persona calcinada, y varios niños quemados que ni la debían ni la temían porque se encontraban en sus respectivas casas, y no tenían relación con el vendedor clandestino de “bombitas”.
Muchos días después el presidente municipal regresó a su tierra natal, como si nada hubiera pasado, después de gastar el dinero del pueblo en Miami, Florida.
Por eso, quitado de la pena autoriza los torneos de lazo, donde los toros destripan a los caballos, mientras la gente se emborracha y aplaude como si fuera un show muy bonito.