Mérida, Yucatán a viernes 26 de abril de 2024
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Te invitamos a opinar si te gustaría que desaparecieron las diputaciones y senadurías plurinominales e invertir el dinero que nos ahorraríamos en escuelas y hospitales.
Como se sabe, en todos los congresos estatales y en el Congreso de la Unión existen puestos de “representación proporcional”, una manera elegante de referirnos a los plurinominales.
Los plurinominales ocupan una curul no gracias al voto de los ciudadanos sino a sus influencias al interior de cada partido.
Quienes son legisladores de representación proporcional se sacaron la lotería sin comprar boleto, pues no gastaron un centavo en hacer campaña, no caminaron, no hicieron compromisos con ningún ciudadano y aún así cobran exorbitante dinero del pueblo.
Además, los plurinominales nunca presentan informes legislativos ni visitan sus estados o distritos, ya que no tienen compromiso con nadie. El único compromiso que tienen es con su bolsillo.
En la imagen pusimos a dos yucatecos: la diputada federal del PRI Dulce María Sauri y el senador panista Raúl Paz Alonzo. Ninguno se ganó en las urnas el puesto por el cual cobran alrededor de 200 mil pesos mensuales.
Dulce María Sauri entró a la Cámara Baja través de la lista del CEN del PRI, jamás ha ganado una elección, por lo que para ella es más fácil esperar a que le regalen los cargos.
Hace un par de meses tuvo la brillante idea de presentar una iniciativa para que tengan costo las credencial del INE demostrando que no le importa en lo más mínimo la economía de los mexicanos.
En nuestras redes sociales miles de personas de todo el país repudieron esa propuesta y lamentaron la nula empatía que tiene la priista con los mexicanos. Además la gente recordó que la credencial para votar ya la pagamos todos los ciudadanos con nuestros impuestos.
En el caso de Raúl Paz es senador por el principio de primera minoría, es decir, perdió, pero aún asi ocupa una curul, como lo hizo en la legislatura pasada Angelica Araujo Lara.
“Gracias” a Paz por primera vez en 18 años el PAN perdió la fórmula en la senaduría, ya que siempre había ganado y ese insitituto tenía dos representantes yucatecos en el Senado.
Hace unos días dimos a conocer que Paz es el más faltista de todos los diputados federales y senadores yucatecos, pues tiene 10 faltas justificadas y 9 faltas por “comisión oficial”.
Es decir, se ausentó casi 20 veces de su trabajo en la Cámara Alta pero como justificó sus faltas no le descuentan ni un peso.
En diciembre del 2019 pasó varias veces a la máxima tribuna del país para exigir a la titular de la Comisión Federal de Electricidad que acepte cobrar un impuesto extra a los yucatecos en el recibo de luz.
Lloró y pataleó para que la funcionaria federal cobre a los yucatecos en el recibo de la luz el impuesto por seguridad. Ojalá así pasara a tribuna para exigir que le bajen los impuestos a los mexicanos.
Pero no sorprende esta actitud de Raúl Paz pues cuando fue diputado estatal (pluri) votó a favor de endeudar a los yucatecos con el “Escudo Yucatán”. Le firmó un cheque en blanco al ex gobernador Rolando Zapata Bello, a quien jamás en seis años cuestionó.
Asimismo cuando fue diputado federal (2012-2015) votó a favor de la gran mayoría de las reformas del entonces presidente Enrique Peña Nieto, entre las que se encuentra la reforma energética y la hacendaria, o sea, votó a favor de subir los impuestos a todos los mexicanos.
Por eso queda claro que personas como Dulce María Sauri y Raúl Paz, entre muchas más, no defienden los intereses del pueblo, al contrario, están viendo como lo hunden más.
Gente como ellos se aferran a cargos plurinominales porque saben que jamás ganarían nada en las urnas.