Un mes ha pasado desde que salieron de vacaciones y ninguno de los 25 legisladores estatales de Yucatán se ha parado en sus oficinas ni por error.
Salieron de vacaciones (ellos prefieren decirle “receso”) el pasado 14 de diciembre y a la fecha ninguno se ha parado en la sede del Poder Legislativo.
Sin embargo, su sueldo lo han cobrado de forma íntegra, es decir, cada uno ha cobrado del erario 100 mil pesos, a pesar que no han hecho nada a favor del pueblo.
Regresan el 01 de febrero, lo que sgnifica que habrán estado mes y medio descansando, seguramente levantar el dedo debe tenerlos exhaustos.
El año pasado aprovecharon la pandemia para no ir a trabajar ni visitar sus distritos, tampoco ayudaron a los damnificados de las múltiples tormentas que llegaron al estado.
Simplemente viven para cobrar sin dar resultados.