Jessica Saidén va por la alcaldía de Progreso por Morena
Luego de ser rechazada por el PAN, la ex priista, ex ecologista, ex panista y ex petista Jessica Saidén Quiroz se inscribió en línea como precandidata a presidenta municipal de Progreso por el partido Movimiento de Regeneración Nacional.
Fuente: REDACCION

Luego de ser rechazada por el PAN, la ex priista, ex ecologista, ex panista y ex petista Jessica Saidén Quiroz se inscribió en línea como precandidata a presidenta municipal de Progreso por el partido Movimiento de Regeneración Nacional.

Llama la atención que hace apenas cuatro días Jessica se presentó como militante de Morena, y ya está inscrita como aspirante a la alcaldía del citado puerto. Durante dos años “trabajó” y fue operadora del PAN.

Como se sabe, Jessica intentó a más no poder ser candidata a diputada federal del distrito 02 por Acción Nacional, pero ese partido prefirió a otra ex priista, Carmen Ordaz Martínez, quien casualmente tiene viejas rencillas con la hija de Luis Felipe Saidén Ojeda.

La hija del eterno secretario de Seguridad Pública también estuvo un breve tiempo en el Partido del Trabajo; hace tres años fue candidata a diputada plurinominal por el Partido Verde (en alianza con el PRI), en el 2015 fue candidata a la alcaldía de Progreso, y en el 2012 fue candidata a regidora de Mérida, en ambos casos por el PRI.

Las tres veces que ha contendido por un cargo de elección popular ha perdido, al parecer, Saidén Quiroz todavía no entiende el mensaje que le han dado los yucatecos. Va para la cuarta derrota.

También fue directora de Coespo en el gobierno del Estado y delegada del CONAFE, todo gracias a Rolando Zapata Bello, quien para quedar bien con el papá de Jessica hizo que despidieran a Carlos “Chelito” Carrillo del CONAFE para que ella fuera delegada federal.

Previamente fue subdirectora en el Ayuntamiento de Mérida, durante el “desgobierno” de Angélica Araujo Lara, quien es su gran amiga.

De hecho, Jessica Saidén entró a la política gracias a los ex gobernadores Ivonne Ortega y Rolando Zapata Bello, quienes buscaban complacer al comandante Luis Felipe Saidén.