En los próximos días inician las campañas estatales, y el que no tiene nada que hacer es el hijo del ex gobernador Víctor Cervera Pacheco, candidato de Movimiento Ciudadano a la alcaldía de Mérida.

De entrada, no tiene recursos para su campaña, no tiene gente, no tiene simpatía ni carisma.

Ivonne Ortega convenció a su primo para abandonar el PRI y convertirse en abanderado del “movimiento naranja” para la presidencia municipal del Mérida.

Víctor Cervera no fue la primera opción de Ivonne Ortega, pero al ver que nadie aceptaba tal responsabilidad a la mandamás de MC no le quedó de otra que invitar a su pariente.

Le ofreció cientos de miles de pesos y a la mera hora lo dejó colgado, pues a duras penas le dará gorras y camisas con su nombre para que regale a la gente durante sus recorridos.

Y la misma suerte corrieron los otros borreguitos que siguieron a doña Ivonne, pues renunciaron al PRI pensando que en Movimiento Ciudadano podrían ganar las elecciones, y la verdad es que solo harán el ridículo.

Se sabe que muchos están molestos porque no les cumplieron lo que les ofrecieron y que incluso podrían dejar la campaña a la mitad si no les dan aunque unos pesitos.