Mañana se cumplen 10 años del polémico triunfo electoral de Ivonne Ortega para la gubernatura de Yucatán, pues el 20 de mayo del 2007 le dio una paliza a su contendiente panista Xavier Abreu Sierra, quien ya se sentía gobernador del estado.

Una década ha pasado del regreso del PRI al gobierno del estado, luego de seis años de la única administración estatal panista (2001-2007) en la persona de Patricio Patrón.

Ivonne tomó protesta un par de meses después, con lo que inició la que quizá ha sido la administración más polémica de todas, pues en cinco años no creó ninguna obra con recursos propios.

Y aunque recibió dinero del gobierno federal no edificó ninguna obra; por si esto no fuera suficiente se la pasó solicitando préstamos, creando una enorme deuda al estado que tardará muchos años en saldarse, obviamente, con dinero de los yucatecos.

Dejó a medias los hospitales de Tekax y Ticul y el Palacio de la Civilización Maya, obras en las que se invirtieron millones de pesos y que jamás fueron concluidas. También gastó millones de pesos en estudios de viabilidad del controvertido tren bala, que luego fuera cancelado.

Ivonne lamentó que el presidente Enrique Peña haya cancelado este costoso proyecto, sin embargo, en cinco años de gobierno Ortega Pacheco nunca lo intentó hacer, aunque sí gastó millones de pesos en estudios de viabilidad que se fueron a la basura porque de nada sirvieron.

Como todos saben, ahora Ortega Pacheco aspira a ser presidenta de la República, y poco a poco hace campaña en todo México, sin embargo, por extrañas razones no ha venido a Yucatán.